Paddington the Musical estrenó oficialmente en West End y las críticas parecen estar de acuerdo en que es la imperdible de Londres.
Ya muchos hemos visto el puppet, escuchado un par de canciones, visto videos de los aplausos y fotos de la enorme tienda dedicada a la merch en Paddington the Musical, pero la realidad es que hasta ayer, el musical permanecía en previos en West End. Pero ahora sí la obra está oficialmente estrenada en Londres, las críticas han sido publicadas y parece ser que el fenómeno teatral en el que se está convirtiendo la puesta también se ha robado el corazón de la prensa.
¿Será entonces que es la nueva imperdible del mundo musicalero?
Veamos…
Variety .- «Peluda, divertida y muy amarrada, el muy anticipado musical de Paddington finalmente estrenó en el West End y está vivo no sólo con alegría, pero con otra cualidad cada vez más desaparecida en el teatro: absoluto encanto cautivante».
What’s On Stage .- «Era inevitable que una versión de esta historia acabara siendo musical. Lo que no era inevitable es que Tom Fletcher (detrás de la música y letras) y Jessica Swale (que escribió el libreto) armaran un show tan perfecto tonal y emocionalmente que el entero de la audiencia queda extasiada desde el primer momento en el que oso pisa el escenario, y permanecen haciendo aaws y ooohs, riendo y llorando hasta el final».
The Times .- «Este oso cantante te va a robar el corazón. Entre las animosas canciones de Tom Fletcher, los diseños de Tom Pye que reflejan lo icónico de Londres y ese oso adorable, este show en el Savoy Theatre es uno que se tiene que ver».
Time Out .- «Es difícil explicar por qué el momento en el que Paddington se aparece en el escenario al inicio de este musical es tan emotivo. No es el Paddington de las películas: se ve diferente, más como un osito de peluche, y la voz de Hameed (uno de sus dos intérpretes) es más juvenil, más infantil que la de Ben Wishaw en cine. Se parece más al Paddington de los libros de Michael Bond, pero tampoco es completamente él tampoco, dado lo mucho que canta y lo parlanchín que eso lo vuelve. Es un Paddington nuevo. Pero fundamentalmente es Paddington, ahí en el cuarto con nosotros.»
Theatre Weekly .- «Hay algo particularmente complicado en adaptar a un personaje tan querido como el oso Paddington para el escenario de un teatro. La nostalgia puede ser una trampa, y el sentimentalismo una muleta. Lo que el musical de Paddington logra, sin embargo, es algo mucho más ambicioso: un musical que honra la creación de Michael Bond al mismo tiempo que le habla a una audiencia contemporánea con ingenio, calidez y sofisticación.»
The Telegraph .- «¿Es Paddinton un nuevo clásico a la par de Mary Poppins o Marilda? No. Está un poquitín trillado, y un tanto atiborrado de canciones, pero como el mismo oso, sigue siendo una gran adición a la familia de los musicales británicos. ‘Por favor cuide de este oso», dice el letrero que carga Paddington. Y claro, claro que lo haremos.
The Standard .- «Paddington es idéntico al que conocemos de una manera hermosa. En los pocos momentos en los que el show baja el ritmo sólo tienes que voltear a ver al oso para volverte a maravillar. Tiene que ser una de las creaciones teatrales más magnífica en años recientes, ahí arriba donde están los puppets de War Horse o el vestido onduleante durante Defying Gravity en Wicked.»
London Theatre .- «El Acto Dos abre con ‘Marmalade’ (¿cómo más se iba a llamar?) y es todo lo que una canción y un número de baile a tope deben ser, y no es la única escena en la que el diseño de escenografía de Tom Pye y el diseño de video de Ash J Woodward se combinan para regalarle a la audiencia un festín visual. Alguien en algún lado seguro se va a lamentar de que la producción deja poco, si no es que nada, a la imaginación. Y ése será problame de ellos, francamente, porque hay mucho que admirar en este apantallante y precioso show.»
The Independent .- «Paddington es un abanderado para los refugiados, un ícono del multiculturalismo, e incluso una Parca surreal que llevó a la Reina hasta el Cielo en los memes que proliferaron después de su muerte. Y ahora, en su papel más inesperado, es un amable fanfarrón rockstar, soltando potentes baladas en un glorioso, espléndido y excéntrico musical que transporta a esta leyenda peluda al escenario.»
The Guardian .- «Las canciones de Tom Fletcher son maravillosas, el libreto de Jessica Swale es apasionado, las coreogragías de Ellen Kane vigorosas. Dirigido por Luke Sheppard es realmente muy hermoso en su diseño escenográfico (por Tom Pye), desde que inicia en la tienda de curiosidades del Señor Gruber e incluyendo varios dramáticos efectos especiales (con proyecciones de otro nivel diseñadas por Ash J Woodward). Hay confeti, panfletos de «oso perdido» que caen del cielo, y sorpresivos chorros de agua disparados a la audiencia.»






