La serie de Titans finalmente llegó a México a través de Netflix, ¿pero nos logra complacer a nosotros los fans de este equipo de superhéroes?

DC y Warner han decidido apostar por un nuevo proyecto para la plataforma de Netflix (al menos en México) y como resultado de una larga espera nos han deleitado con Titans, que desde su planeación y hasta su ejecución ha sufrido toda una serie de cambios…aparentemente para bien.

Este spin off de Titans es llevado por Akiva Goldsman, Geoff Johns y Greg Berlanti. La trama es un poco similar a lo que ya conocíamos de los jóvenes titanes en caricatura, la diferencia aquí es la edad adulta de algunos de ellos (Robín y Starfire, interpretados por Anna Dipo y Brenton Thwaites).

La historia gira en torno a Rachel, mejor conocida como Raven (interpretada por Teagan Croft) quien pide la ayuda de Dick Grayson luego de ser perseguida por un grupo de villanos, que incluso asesinan a su madre. Es así como poco a poco se van encontrando los miembros de este joven equipo, además de Hawk y Dove, que también hacen apariciones.

Podemos decir que esta serie es la esencia del Universo DC, un universo oscuro, a diferencia de lo que hemos visto de Marvel o incluso de otras series de esta franquicia como Arrow o Flash.

El desarrollo de los personajes está bien logrado en el sentido de que no son solamente violentos u hostiles por que sí, pero a lo largo de cada episodio se nos muestra un poco de la vida de cada integrante y el porqué se han convertido en los ayudantes jóvenes de los grandes superhéroes.

Es una serie que claramente está dirigida a un público joven adulto, puesto que la carga de violencia de algunas escenas de combate puede resultar sensible para un público infantil, así como la ejemplificación de situaciones por las que personajes como Hawk (interpretado por Alan Ritchson) han pasado en su niñez, que definitivamente no son clasificación A.  

La duración de esta primera temporada es de 11 episodios. Aunque como es costumbre de este tipo de series sí hay uno que otro episodio de relleno, en general la temporada está perfectamente lograda y va uniendo casi con hilo las historias secundarias con el arco principal, sin jamás olvidar su trama (que sí llega a pasar en otras que francamente se convierten en unitarias).

En conclusión, es una serie que vale la pena ver independientemente de sí eres o no fan del Universo DC. Contiene lo necesario para llenar las expectativas de la audiencia: buen guión, buenos actores, buenos efectos especiales y sobre todo buenos superhéroes. Sip. Estamos satisfechos.

¿Ustedes?

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