El musical que se presenta en el Teatro Milán por pocas semanas maneja un formato que pudiera resultar sorpresivo para algunos, pero son las voces de sus protagonistas la verdadera razón para no perdérselo.

Canciones Para Un Mundo Nuevo no es un musical. Al menos no como lo tenemos concebido. Cuenta una historia. Más, cuenta varias. Y un tema en común las amarra como palillos que fácilmente podrían desprenderse del montón y funcionar como unidades por separado. Canciones Para Un Mundo Nuevo es en realidad un song cycle, es decir, una serie de canciones, cada una un relato unitario, pero que no se manejan con un Acto I, Acto II, personajes, trama, comienzo y desenlace, si no como mini historias cantadas en las que los actores se rotan para hacer pequeñas interpretaciones, que sumadas y vistas desde lejos forman el panorama de la obra final.

Ese segundo de desprendimiento. Ese instante en el que uno tiene la opción de quedarse sentado en su seguridad, en su comodidad, o soltar los brazos y dejarse caer a un vacío que podría significar libertad o arrepentimiento, todo menos estancamiento, es la inspiración de todas las historias que nos van contando.

Desde ‘Solo Un Paso’ sobre una mujer a punto de tirarse de la ventana de su edificio a menos que su pareja le ponga la atención merecida, ‘El Tren’ sobre un prodigio del fútbol que dejó su pasado de ausencia para convertirse en alguien o la divertida ‘La Señora de Santa’ sobre, sí, la Señora Claus y lo poco conforme que está con San Nicolás, las 16 canciones de este song cycle van transitando por una variedad de géneros, desenlaces alegres o tristes, melodías esperanzadoras o al borde de religiosas, todas recordándonos que el Mundo Nuevo es aquél que está adelante. Oculto frente a nosotros a menos que demos el siguiente paso.

Jason Robert Brown escribió éste, su primer musical, mucho antes que The Last 5 Years, y en sus acordes y melodías ya se puede encontrar el estilo relatado, jazz-funk del compositor, que además se mezcla con melodías pop y juegos godspell que el elenco elegido por Playhouse Entertainment y el director José Manuel López Velarde dispara a niveles de grandeza con un manejo francamente admirable de sus habilidades.

Majo Pérez, Paloma Cordero, Anuar y Abel Fernando son los cuatro intérpretes que van jugando a ser esta serie de personajes y que hacen suyas las canciones, vistiendo el musical con algo que pocos allá afuera tienen: mucha personalidad vocal. Cada uno con una tesitura completamente distinta al otro, pero que cuando se juntan en armonías resultan el perfecto complemento contrastante. Un franco coro que se puede disfrutar con los ojos abiertos o cerrados, y que encuentra la manera de colarse por los poros.

Edgar Ibarra, en la dirección musical y el piano, también hace alarde de sus habilidades musicales, consiguiendo con una orquesta de, básicamente, tres músicos, todos los instantes necesarios y permitiendo brillar a sus intérpretes cada uno por separado, y luego en conjunto como un sólo instrumento perfectamente afinado.

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No esperes el formato clásico, pero no por eso te pierdas de Canciones Para Un Mundo Nuevo que ya en el último de los casos y si todo lo demás falla, puedes disfrutar como un concierto en las mejores voces del teatro musical en México.

Canciones Para Un Mundo Nuevo se presenta Lunes y Martes en el Teatro Milán.